Eller anotó el único tanto del encuentro al cabecear un centro del argentino Sergio "kun" Agüero, en el minuto 31, instantes después de que Guille Franco cayese en su área tras un saque de esquina.

Roig se mostró indignado con la actitud del defensa rojiblanco. "Todo el mundo lo ha visto. Ha sido una falta de deportividad y no sólo eso, sino que el jugador que ha metido el gol, encima se ha cachondeado. En vez de disculparse, tras el partido se ha vanagloriado, se ha mofado de nosotros", dijo, en declaraciones a Canal Plus.

"No somos un equipo pícaro. Antes, nosotros habíamos tirado el balón fuera, porque un jugador suyo estaba en el suelo, pese a que teníamos un contragolpe. Ellos lo han visto (a Guille Franco), tanto el que centra (Agüero) como que ha rematado (Eller).

"Equipo de sinvergüenzas"

El dirigente villarrealense también se quejó del árbitro Muñiz Fernández. "Además, está el penalti sobre Gabi. Si eso es penalti, también lo es el de José Mari, al final del encuentro, porque también le tocan".

"Hay que dejarse de hablar de 'fair play'. Lo que hay que hacer es cambiar la norma y que sea el árbitro el que pare el partido en cada caso", destacó al volver a hablar de la jugada que decidió el encuentro.

El vicepresidente del Atlético, Lázaro Albarracín, se quejó, a su vez, del trato que le dispensaron los directivos del Villarreal.

"En 50 años nunca me había sentido así. Un consejero, en el descanso, me ha dicho que somos un equipo de sinvergüenzas. No se trata de una final, es un partido más y no hay para tanto. Además del gol, hemos tenido un penalti, que hemos fallado y muchas ocasiones. Felicito a mis jugadores porque se han portado como héroes", agregó.